El circuito urbano más antiguo de España regresó por todo lo alto al municipio leonés tras dos años de parón
Ya lo dijo la leyenda del motociclismo español, Ángel Nieto, en un momento de su carrera: «Para ganar un Mundial, primero hay que ganar en La Bañeza». Y es que si no existiera el GP de La Bañeza, alguien se encargaría de inventarlo. Tras dos años en los que los motores de gasolina de las motos clásicas se apagaron, el municipio leonés pudo vivir ‘el regreso del rey’ de las competiciones de motor a nivel nacional.
Con más de 70.000 personas a ambos lados del circuito, desde los balcones o ventanas de sus casas, el circuito urbano más antiguo de España pudo celebrar que hace 70 años, allá por 1952, un sueño tomaba forma hasta convertirse en un lugar de culto para la afición motera nacional e, incluso atreverse a pronunciar, internacional.
Un GP de la Bañeza que, en cuanto al plano deportivo, tuvo como vencedores en la categoría Clásicas 4T al malagueño Juan Francisco García; en Clásicas 2T al murciano Sergio Fuentes, el cual rompió el récord de la competición al coronarse siete veces consecutivas ganador de la prueba; y en GP125/Moto3 a Álex Martínez, dedicando la victoria a su hermano fallecido.
La despedida de una leyenda
Sin duda, uno de los platos fuertes de la jornada fue el adiós de una leyenda del motociclismo de los 60 y los 70 como el catalán Benjamín Grau. Lo expresaba entre lágrimas y ante una afición que no detuvo en ningún instante su merecida ovación: «He corrido en muchísimos circuitos, pero quería que el último fuera este que tantas veces corrí y en el que me sentí tan querido».
El veterano de 76 años, y con una curva en el trazado con su nombre, se despidió con dos vueltas de honor, seguido de todo el convoy de los participantes en la exhibición de las motos eléctricas, a una carrera que solo él, y su espíritu, podía prorrogar. Y en La Bañeza, una localidad de la que ya forma parte y que, sin lugar a dudas, sus habitantes ya le consideran un paisano más.
Por supuesto, el fin de semana no solo se resumió en las carreras del domingo, sino que, como es habitual desde siempre, el gran ambiente motero que se respiró en todas las esquinas de la localidad leonesa fue el principal protagonista. Además de sumarle a ello la Feria del Motor, con cerca de 30 expositores del mundo de las dos ruedas. Una cita, posible gracias al Ayuntamiento de La Bañeza y al Moto Club La Bañeza, que sitúa cada año al municipio leonés en el mapa internacional.
