Con las competiciones FEB encarando el último tercio de las ligas regulares, es el momento de no fallar, máxime si se juega ante rivales directos, frente a los que una victoria puede tener un poco más de valor si cabe, algo que en esta jornada les sucede a Aros y Ciudad de Ponferrada, que en caso de vencer en sus compromisos fuera de casa, darían un paso muy importante para ser equipos de playoff de ascenso. Además, hay partidos que siempre son especiales, pese a que los equipos no lleguen a priori igualados al choque, y esos son especialmente los derbis, con Basket León y Reino de León reeditando este fin de semana una nueva edición del derbi masculino de la capital leonesa.
Oportunidad para sellar el pase virtual al playoff
Abrirá la jornada este fin de semana el Aros Patatas Hijolusa, que tiene una complicada salida para medirse al Barça CBS el sábado a partir de las 18:00, ante un equipo que actualmente es cuarto clasificado en el grupo A de Liga Femenina 2, tres victorias por debajo de las leonesas, que si logran salir victoriosas, pondrían cuatro triunfos de por medio con la quinta posición, algo que, a falta de solo cinco jornadas más para el final de la liga regular dejaría sellado de forma virtual el pase a la disputa de una nueva fase de ascenso para las leonesas.
No será una empresa fácil la de ganar en tierras catalanas, como ya demostró en la primera vuelta el Barça en San Esteban, en un partido que a punto estuvieron de llevarse, pero que finalmente el Aros pudo sacar adelante, sacando su mejor versión, algo que deben repetir las jugadoras de Moses, ya que fuera de casa se complica un poco más todo, sabiendo que enfrente habrá jugadoras peligrosas como Dixon, Wone, Boleda o Pendande, que saben que una victoria es importante para no caer de las cuatro primeras posiciones, y para además romper con una mala racha que las hace acumular ya tres derrotas consecutivas, algo que les ha hecho perder terreno con sus rivales y poner en peligro el objetivo de estar en fase de ascenso.
Un derbi siempre es un derbi
Es probable que tanto ULE iRiego Basket León como Agustinos Leclerc Reino de León no estén teniendo su mejor año en el grupo A-B de Liga EBA. Los primeros se han complicado el objetivo de meterse entre los dos primeros, quedándose sin margen de error para seguir en la pelea, mientras los segundos han estado todo el año en la zona más baja, sufriendo mucho para ser competitivos, por lo que tienen ya sellado su descenso de forma virtual. Pero al final, un derbi es un partido diferente, y la trayectoria previa importa poco en muchas ocasiones, algo que se verá de nuevo este domingo a las 18:30 en el Palacio de los Deportes leonés, que es probable que registre una de las mejores entradas de la temporada para vivir este duelo de rivalidad local.
Será Basket León el que ejerza de local y ostente el cartel de favorito, aunque los de Julio González no quieren confianzas, ya que su 2019 no está siendo especialmente bueno, habiendo caído hasta la sexta posición. Pese a todo, su superioridad física es notable, con Tolliver y Sergio Martínez como referentes interiores, unas figuras de las que carece un Reino de León que ha mejorado su nivel, pero que sigue sufriendo mucho para ser competitivo, necesitando que los Miguel Domínguez o Guillermo Rodríguez Luque tengan un día inspirado cara el aro para plantar cara a los rivales, aunque en este caso, los de Fermín Hueso, sabedores de su inevitable destino, que será el descenso deportivo, juegan sin la presión que tendrá Basket León, que si falla, verá ya imposible una remontada que ya de por sí es complicada, así que ingredientes de interés no le faltan a un choque que volverá a levantar pasiones entre la hinchada leonesa.
Partido para marcar diferencias
También en domingo y a partir de las 18:30 tendrá su partido el Bierzo Fitness Dentomedic Ciudad de Ponferrada, que visita la pista de un renacido Huniko Gijón Basket, que ha pasado de casi descartado en la pelea por las dos primeras posiciones del grupo A-B de Liga EBA, a ser ahora mismo tercero a solo un triunfo de Chantada y del propio equipo berciano, que son colíderes. Por tanto, duelo de altos vuelos el que se verá en la ciudad asturiana que puede suponer otro golpe encima de la mesa del equipo de Luis Daniel Enríquez, o la confirmación de que Gijón optará a todo hasta el final.
Están los bercianos ya acostumbrados a estos duelos complicados en los últimos tiempos, ya que las últimas salidas a Chantada y Culleredo tenían el mismo nivel de dificultad, saldándose con una victoria en el primer caso y derrota en el segundo. La nota diferencial estuvo en la producción ofensiva, que frente a Culleredo quedó muy mermada por los errores ante el aro rival, algo que resta muchas opciones a un equipo acostumbrado a rondar la barrera de los cien puntos. Necesita por tanto esa versión alegre y acertada el Ciudad de Ponferrada, ya que enfrente Gijón no lo va a poner nada sencillo, con los hermanos Ejim rindiendo a muy buen nivel y dando mucho nivel físico a su equipo, bien acompañados por Wineglass en el interior y por Bretón en la dirección de juego, aunque sufriendo un poco por lo corto de su rotación, y dependiendo, como también le pasa a Ciudad de Ponferrada, del nivel que den sus jugadores foráneos, así que en esos duelos directos ante los Prince, Warnock y McDonnell se dirimirá qué equipo resulta ganador.