La Cultural recibe al club andaluz (domingo, 16:00 horas) en el Reino de León con la intención de sumar los tres puntos y meterse en puestos de Copa del Rey
En medio de la recién comenzada Semana Santa de León, y con la Cultural habiendo recibido la bendición del Santo Padre en estos mismos días, el equipo leonés afronta una cita en la que, por partida doble, se podrá entonar de un modo más literal eso de saltar al campo «con ayuda divina». Y es que, siendo totalmente un milagro que los de Docampo asalten esta temporada los puestos de playoffs de ascenso, otro objetivo se ha dibujado para las nueve últimas jornadas ligueras.
Con Real Madrid Castilla y Celta de Vigo B ocupando las zonas verdes de la clasificación, los puestos de clasificación a la Copa del Rey se han vuelto un plato más asequible para los intereses leoneses. Sin ir más lejos, el rival que ahora mismo marca ese premio no es otro que el siguiente contrincante al que se medirá la Cultural esta jornada, el Linares Deportivo.

Un club con prácticamente igual recorrido que los blancos en esta campaña. Y es que los linarenses comenzaron como un auténtico obús este curso, pero el paso de las semanas hizo que esa pólvora destructora del arranque de liga acabara mojándose hasta bajar a los andaluces hasta la zona media de la tabla. Una irregularidad igual de palpable por los que entrena Eduardo Docampo.
Como mirarse en un espejo
La Cultural preparará el Reino para una jornada en la que mucho estará en juego. Y es que con el 0-2 materializado en el choque de la primera vuelta, una victoria de los leoneses supondría adelantar al Linares en la tabla y, por ello, ocupar esa séptima posición que da acceso a la Copa del Rey. Incluso, si se cayera por menos de dos goles, este seguiría favorable a los blancos… aunque serían seis los puntos de desventaja.

Hablando del contrario, el Linares Deportivo llegará a León con similares números a los de Eduardo Docampo. Si bien es cierto que en cuanto a goles a favor, los andaluces superan con creces a los del Bernesga (41 a 33), también lo hacen en los tantos en contra; habiendo encajado un total de 44 por 31 de los de Docampo.
Un auténtico choque de trenes en el que se verá si esa bendición del Papa Francisco I es efectiva o si, por el contrario, ni la ayuda divina puede echar una mano a un equipo que ha vuelto a recuperar la sonrisa tras la debacle que supusieron las ocho semanas sin sumar los tres puntos.