La Cultural y Deportiva Leonesa viaja a Riazor con la intención de regresar a la senda de la victoria y no desengancharse de los puestos de la zona alta
Tras dos derrotas consecutivas ante rivales, aparentemente, inferiores a nivel clasificativo, la Cultural afronta el regreso a la competición con las pilas cargadas y el reseteo en su disco duro particular. Y es que los pinchazos ante la Balona y el Rayo Majadahonda han supuesto que los leoneses comiencen a descolgarse de unos puestos que, en un inicio y antes del parón, se creían posibles.
Este domingo (19:00 horas), y tras dos semanas de reflexión, la nave pilotada por Eduardo Docampo desembarca en tierras coruñesas para hacer frente al coco de los cocos de la categoría, el Deportivo de La Coruña. Si bien es cierto que los blanquiazules no atraviesan su mejor momento en la temporada, estando en estos instantes fuera de playoffs, el equipo entrenado por el ex culturalista Óscar Cano tiene todas las papeletas para luchar por el ascenso a Segunda División.

Un escenario, Riazor, en el que cualquier futbolista querría disputar sus partidos y que se ha convertido en un auténtico fortín; con tan solo una derrota y un empate en el casillero gallego. Una presión para los futbolistas blancos y, a la vez, una motivación la de jugar ante tanto público y en semejante e histórico escenario; hogar en el pasado de grandes eliminatorias de Champions League.
Un Depor muy engañoso
Como se viene apuntando, el Deportivo de La Coruña de esta temporada no comparte las mismas cifras que el de la pasada campaña; aquel que logró imponerse a los leoneses en ambas contiendas. Si bien es cierto que la zaga coruñesa ha logrado dar con la clave en la defensa en los últimos choques, en ataque los leoneses no tienen nada que envidiar a los de Riazor.

Con 13 tantos totales, los de Óscar Cano comparten cifras ofensivas con los de Eduardo Docampo. Destacando, con cuatro efectivos, Mario Soriano; máximo artificie de los gallegos. Por supuesto, las miradas también estarán puestas en un Quiles que todavía tiene que mostrar su mejor versión en el presente curso. A tener en cuenta, pero en este caso por su ausencia, será la del guardameta Ian Mackay. Viejo conocido de la entidad culturalista y que en esta jornada no podrá vestirse de corto.
Así las cosas, y por primera vez en varias semanas con la enfermería cerrada en la Cultural, los blancos intentarán comenzar con el arreón tras despedirse del parón. Una vuelta a la victoria que haga aumentar el optimismo y las ganas por una afición y equipo con la necesidad por volver a estar en los puestos de arriba de la clasificación.