El ex jugador berciano, y desde 2015 integrante del cuerpo técnico de Sergio Scariolo, habla en los micrófonos de Radio MARCA León acerca del triunfo de España en Europa
Cuando un niño se enfunda las zapatillas y agarra el balón naranja por primera vez, sabe que nunca jamás volverá a separarse de él. Como tantos en el mundo del baloncesto, así comenzó la aventura del berciano Manuel Aller. Ya no son cinco años, sino casi 60, y el que una vez defendiera los colores de la Selección española en el Eurobasket de 1989, ahora puede enorgullecerse de haber formado parte de todo un grupo que dio un golpe encima de la mesa en Berlín y logró la gesta que hoy todo un país continúa celebrando.
«Con la cantidad de gente que se retiró, con todos los lesionados que había… la transición no tenía que ser tan radical; no creíamos que podíamos hacer lo que hemos hecho, y menos de esta forma», expresaba un Manuel Aller aún emocionado por el título conseguido en los micrófonos del Directo MARCA León de este martes. Un Eurobasket fruto, como bien quiso destacar, «no de la casualidad, sino del trabajo y el esfuerzo».

Una cita europea, para muchos la mejor en los últimos años, a la que España no llegaba con el cartelón de favorita. Sin los Gasol, sin Mirotic, sin Llull, sin Calderón, sin Rubio, sin todos esos que marcaron una época, los Hernangómez, Jaime Fernández, Lorenzo Brown, Alberto Díaz y compañía demostraron que ese término conocido como ‘generación de oro del baloncesto español’ es atemporal. «Sergio Scariolo es bueno en muchas cosas, pero a la hora de poner retos y motivar a los suyos es un verdadero maestro», destacaba Aller.
Un pilar indispensable en el triunfo de ‘La Familia’ que tantas veces no recibe su merecido reconocimiento. Y es que el papel de Manuel Aller con el conjunto nacional pasa por un ordenador y muchas horas de visualización. «Mi trabajo es recoger toda la información desde las categorías inferiores de la Selección, para que cuando los jugadores lleguen arriba no les sea muy brusco el cambio», explicaba el ex jugador berciano. Un mundo que pasa por estadísticas y un gran arsenal de cifras y números. Un importante cometido que, incide entre risas el protagonista, «solo se llega a aprovechar el 1%».

Por último, Aller ha tenido tiempo de reflexionar sobre la gesta lograda, explicando que «la clave de todo ha estado en el grupo, algo que está por encima de todo y que ha definido a este equipo». Por no olvidar el momento clave de este Eurobasket: «El partido contra Alemania, delante de 17.000 aficionados locales, no pasé algo así desde la final de Francia en 2015». Un final feliz digno de cuento de hadas con un sabio deseo, el de que «estas alegrías hagan que más niños quieran practicar baloncesto».
Fotografías: FEB