Los leoneses suman su tercera derrota en el mes de marzo, el cuarto partido sin conocer la victoria, tras caer en Riazor ante el Deportivo de La Coruña por 2-1
En la madrugada del 14 al 15 de abril de 1912 se produjo uno de los desastres marítimos más famosos de la historia de la humanidad. A eso de las 23:40 horas de la noche, un iceberg de inmensas proporciones impactaba en uno de los laterales del RMS Titanic, el trasatlántico más grande construido en aquella época, produciéndole una brecha en el casco insalvable.
Es a las 00:15 cuando el telegrafista Jack Phillips y uno de los miembros de la tripulación Harold Bride envían un mensaje en código morse solicitando ayuda: «CQD. SOS. ¡El Titanic se hunde!». Para el no conocedor del tema, las siglas CQD hacen referencia a la frase en inglés «Come Quick, Distress»; traducido al castellano, «Ven Rápido, Emergencia».

Y es que en la tarde de este sábado, a eso de las 20:45 horas, la Cultural y Deportiva Leonesa, de igual forma que hace 110 años los miembros del Titanic, ha mandado ese mismo mensaje, «CQD. SOS. ¡La Cultural se hunde!». Aunque en esta ocasión no ha sido un iceberg, sino cuatro, los que el barco capitaneado por Curro Torres ha encontrado en este mes de marzo. ¿El último? El golpeado en la costa de Riazor.
Todos los detalles del ABANCA Riazor
Los leoneses llegaban a aguas gallegas tras haber impactado ya contra sendos bloques de hielo en Majadahonda, Santander y en el propio Reino de León ante la SD Logroñés; aunque este último no había dejado tan dañado el casco. Lejos de ello, la Cultural necesitaba de un buen puerto para poder arreglar su maltrecha cubierta. Sin embargo, lo que a priori parecía un buen sitio donde poder cargar el barco de provisiones para proseguir su travesía, significó el cuarto y definitivo iceberg en el que poner fin a la aventura.
Porque los marineros de Curro Torres vieron como una gran masa de hielo de nombre Quiles ponía el 0/9 en las salidas de este mes de su equipo. Porque también vieron que aunque los gallegos llegaban con peor precedente que los leoneses, fueron los que finalmente salieron a flote ante un galeón sin velas blancas. «CQD. SOS. ¡La Cultural se hunde!», emitieron. Menos mal que aún hay buenos ‘flotadores’ de diferencia entre los del Bernesga y el descenso.

Una tercera incursión en este mes de marzo que, lejos del resultado final, comenzó de la mejor forma para la tripulación leonesa. Álvaro Juan avisaba con un disparo que Mackay en portería detenía; y más tarde Castañeda finalizaba un saque de esquina de Solís que la defensa gallega se veía obligada a despejar.
Pero, poco a poco, la tempestad comenzaba en Riazor, y esas aguas tranquilas y mansas daban paso a una cadena de icebergs que sortear. Primero era William el que probaba a Sotres. Sin problemas para el cántabro. Peores incursiones ha vivido esta temporada. Luego Fran Cruz se hacía grande para despejar un saque de esquina de los blanquiazules. Se comenzaba a tambalear la cubierta.
Hasta que, finalmente, el trasatlántico leonés chocó contra un bloque de hielo llamado Quiles. Un centro del Depor fue despejado por Sotres. El balón le caería perfecto al de Huelva para que, con un movimiento y un disparo cruzado, perforara el acorazado leonés. Un tanto que hacía encender las alarmas en todo el barco. El agua comenzaba a entrar, y ya era imposible de achicar.
Con la vuelta del descanso, los jugadores del RMS Cultural salieron a intentar salvar su querida nave. Obolskii conectaba una falta botada por Solís, pero el cabezazo del ruso se iba fuera. Aunque, en el desesperante intento por salvar el naufragio, los pupilos de Curro Torres lograron parar el hundimiento. Fue Nahuel, recién ingresado, el que recuperó casi en área rival el cuero. Entró en la misma, y sirvió el balón en bandeja para que Obolskii, el bueno de Niko, pusiera las tablas en el casco maltrecho.
Un 1-1 que daba tiempo a que los leoneses recibieran ayuda. Una ayuda que nunca llegaría. Y es que a los dos minutos, Quiles, nuevamente, terminaría por hundir el barco. William ingresó en el área, y Fran Cruz se lo llevó por delante. Segunda amarilla para el cordobés, segunda expulsión en la temporada, segundo tanto del Depor en el partido (esta vez desde los once metros), enésima vez que la Cultural acaba con diez en esta temporada.
El resto del encuentro, la crónica de un naufragio esperado. Galicia, tierra de marineros y leyendas, volvió a ser protagonista en el hundimiento de una nave. Que no se niegue, la Cultural lo intentó hasta el final, pero si once contra once estaba complicado, diez contra once lo estuvo más. Un resumen correcto a una temporada incorrecta. Los salvavidas y los botes están ya cogidos. Mientras, lo poco que se puede salvar sigue tocando una dulce canción a la par que el agua va llegando al cuello. Por suerte, el final está cerca y el descenso lejos.