Una buena Cultural y Deportiva Leonesa firma las tablas ante la UD Logroñés (0-0) en el primer partido del año
Son típicos, con la llegada del nuevo año, los populares propósitos de cara a los siguientes 365 días. Hay quien decide dejar de fumar, hay quien el primer día se presenta en la puerta del gimnasio a prontas horas de la mañana… y hay quien decide coger un equipo de fútbol y darle un vuelco de 180º completo.
Porque no, el famoso «gooool en Las Gaunas» no se entonó en la capital riojana este sábado. Pero sí se entonó otros mensajes. El de la sobriedad en defensa, pues la Cultural no tuvo su gol en Las Gaunas, pero el Logroñés tampoco. El de la electricidad en ataque, lástima de ese último toque. El de la resurrección y las segundas oportunidades, que se lo pregunten a Riki Mangana y Galas. No hubo gol en Las Gaunas, no hubo por primera vez a domicilio en la temporada. Primer propósito de año nuevo cumplido.
Todos los detalles de Las Gaunas
Llegaba la Cultural a La Rioja. Malos recuerdos de su visita a Calahorra hace apenas un mes. Y llegaba con todas las miradas detrás de la nuca. Lo del Leganés y Depor no podían servir como muestra de la Era Curro Torres, por lo que Las Gaunas se erigía como el escenario de la prueba de fuego. Y vaya escenario.
Por segundo partido consecutivo, Rodri no entraba en los planes del valenciano. Cristian Galas era el hombre elegido. Más de uno seguro se echó las manos a la cabeza. Y con ello, arrancaron los leoneses 2022.
Y tal vez fue el despeje durante las vacaciones. O que el carbón que los Reyes trajeron no sentó bien. Pero la imagen de la Cultural en el inicio del encuentro fue totalmente desconocido. El equipo de Curro Torres tuvo, desde el primer momento, el control del cuero y las ocasiones. Gaztañaga era el reloj, y Álvaro Juan y Aarón las manillas.
Y si algo arriba salía mal, por primera vez, abajo estaba cubierto. Riki Mangana dejó el disfraz de Arbeloa y se vistió con el de Cafú. La banda derecha se tiñó del color de la bandera venezolana, y por ahí Iker Guarrotxena tenía prohibida la entrada. Y en el centro de la zaga, Cristian Galas y Jorge Moreno no dejaban a Aridane ejercer las veces de pivote de balonmano.
Aunque las primeras ocasiones vendrían del lado logroñés. Aridane, viejo conocido culturalista, mandaba un cabezazo al larguero y un disparo cerca del palo de Sotres. Puede que lo único que se escapó a la zaga leonesa. Arriba, Jon Gaztañaga probó a Serantes desde lejos, pero el arquero, atento, salvó la ocasión.
El encuentro pintaba bonito. El público se divertía, el de los dos equipos. Ya en el segundo acto, el poderío culturalista se incrementaría. Primero Gaztañaga, de igual forma que en la primera parte, lo intentaría desde lejos, sin problemas para Serantes. Luego Guarrotxena haría la réplica, sin premio para el vasco.
Volvió Obolskii, junto a Nahuel y Cerrajería. Y sería el de Girona el que dispondría de la más clara del encuentro. Un centro desde la izquierda sería rematado en carrera por el ex del Córdoba. Lástima, el cabezazo fue muy centrado. Instantes después, Dani Sotres salvaría el tanto riojano con una estirada que evitó que el cuero durmiera en la escuadra.
Ya en las últimas, Cristian Galas salvaría a los suyos con una parada con el pecho cuando Sotres estaba totalmente vendido. Necesitaba un partido así el castellonense. No hubo tiempo para más. La Cultural y Deportiva Leonesa no pudo celebrar el gol, pero sí algo más. Celebró las buenas sensaciones. La sobriedad atrás y la rapidez arriba. Un punto, sí, y un propósito cumplido. Ahora, que lleguen los demás.
