La Cultural elimina al Huesca tras voltear el marcador y demostrar carácter, esfuerzo y el juego que la parroquia blanca exige doblegando a los aragoneses
Con dos equipos completamente renovados respecto a la liga, Cultural y Huesca midieron fuerzas sobre el césped del estadio Reino de León. Lucas Giffard fue una de las principales novedades del equipo y pronto tuvo que intervenir.
Primero para detener un lanzamiento y luego para recoger el balón de su portería. Y es que pronto se adelantó el Huesca al transformar Raba una falta directa para sorpresa de Giffard. El equipo de Míchel lució calidad técnica, propia de un equipo de superior categoría. Pero no se achicó la Cultural, que mostró una buena imagen, peleando y sin tapujos buscando la portería rival.
Con un buen Gudiño, incisivo por banda derecha y generando el mayor peligro de la Cultural. El partido estaba abierto, con un Huesca bien plantado y una Cultural con la pelota y moviendo en busca de espacios. Menudo se movió bien por dentro, aunque las opciones no eran claras. El público la tomó con el árbitro, que, sin ser decisivo, desesperó a los culturalistas.
El paso por vestuarios no modificó mucho el guión del partido, que siguió similar, de tú a tú, pero sin ocasiones. Con el paso de los minutos, y sin que la Cultural encontrara el camino hacia el empate, Aira movió el banquillo con el doble cambio y la entrada de Kawaya y Luque.
Era la hora de los valientes y la ‘Cultu’ daba un paso más para conseguir acorralar al equipo aragonés que se encontró con el empate de Benito. Con el Reino enloquecido llegó la jugada del gol. Una buena acción de ataque concluía con un penalti sobre Kawaya que el propio belga transformaba para delirio de la parroquia local. Inmensa la Cultural…
¡Qué pase el siguiente!