La Cultural sigue sin convencer. Otro empate en un momento de la temporada en la que los empates no valen.
Si analizamos el partido al equipo culturalista si parecía valerle. Durante muchas partes del partido la Cultural no pareció un equipo que necesitará la victoria. Y así lo manifestaron después del partido tanto el entrenador como los jugadores. Todos daban por bueno el empate, eso sí, siempre que el próximo partido se lograba ganar en casa al Burgos que es, por cierto hasta el momento, uno de los peores equipos de la categoría. Argumentos de equipo pobre que no parece a aspirar con firmeza al primer puesto del grupo al que si aspira su afición.
En el Toralín solo valía ganar porque es en estos campos donde hay que recuperar los puntos perdidos por ejemplo en casa en las derrotas de Las Palmas y el Castilla. La realidad es que en los últimos 5 partidos se han conseguido 7 de 15 puntos. Y que en la jornada 13 el equipo sigue fuera de play off y a 4 puntos gracias a que el resto de equipos fallan. El empate en el Toralín no puede valerle nunca a un equipo que debe aspirar al primer puesto y que necesita recuperar los muchos puntos perdidos en las primeras jornadas. Y es que, con estos números, se hace difícil incluso pensar que la Cultural pueda hacerse con uno de los cuatro primeros puestos del grupo.
Decía Víctor Cea en rueda de prensa que había que valorar el haber empatado en casa del líder. Pero la Ponferradina es líder sólo porque la Cultural, con un presupuesto mayor, y a priori el equipo más poderoso del grupo se lo está permitiendo. Y se lo seguirá permitiendo si sigue dando por buenos resultados que no sean conseguir la victoria.
Esa falta de ambición no va a llevar al equipo a otro sitio que no sea volver a ser equipo de Segunda División B la próxima temporada. Sin ambición no hay paraíso. Sin ambición no habrá ascenso.
