Rafa Guijosa tiene estos días una doble misión como entrenador para preparar a su equipo de cara a la siguiente cita en Rumanía. Las últimas derrotas han dejado tocado al equipo y «hay algunos jugadores que están tocados mentalmente y lo que quiero es recuperarles la sonrisa y la magia y a jugar».
El técnico del Abanca Ademar es consciente de que «tenemos poco margen» de fallo en la Liga de Campeones, por lo que buscarán una victoria ante el Dinamo de Bucarest que le permita seguir con opciones. Sobre el rival, dijo que «es una de las pistas donde el ambiente más aprieta y son un equipo importante, con movilidad de balón, potencial considerable de lanzamiento y compensado».
Pero dijo que «me preocupa más mi equipo que el rival, si estamos frescos tendremos nuestras opciones». Sobre la situación del equipo, dijo que «sabemos que el público de León es uno de los más entendidos, pero también exigente, es así, hay que ser valientes y asumirlo», por lo que «tenemos que tener la osadía de afrontarlo y conseguirlo».
Escucha las palabras de Rafa Guijosa: