Coger ritmo y poco más. Así estaba dirigido el encuentro en Valencia de Don Juan de este miércoles. El estreno del Ademar León sobre un parqué después de un par de semanas de entrenamiento. Los conceptos no han variado y Rafa Guijosa solamente debe adaptar a las dos única caras nuevas del equipo. Por el momento, el conjunto marista ya demostró que está en el buen camino en un año en el que retornará a la Champions League y que comenzó con goleada ante un Alcobendas que le duró a los leoneses solamente media parte.
El partido tenia el principal aliciente de ver en acción a los dos únicos fichajes hasta el momento. Zivan Pesic y Predrag Vejin dispusieron de sus primeros minutos esta pretemporada con la camiseta de Ademar León. Especial para el lateral serbio, que retorna a la disciplina marista después de pasar por el Dunkerke, Metalurg y Al Jazira. Acompañados ambos de jugadores de la cantera que dispusieron de su oportunidad. Las únicas ausencias fueron las de Juanjo Fernández, que continúa con su proceso de recuperación; y Gonzalo Pérez, que acaba de colarse en los cuartos de final del Mundial juvenil que se disputa en Georgia.
La carga física se hizo notar en los pupilos de Rafa Guijosa, que no entraron con el ritmo deseado. Delante estaba un Alcobendas de inferior categoría, pero con la ilusión de hacer un gran partido ante un equipo de Champions League. Pese a ello, el potencial marista en ataque quedó patente en el descanso con el 21-16 que ondeaba. Lo que también dejó claro es que la seriedad defensiva no era la que se presupone a un equipo de este nivel. Quedaban 30 minutos para mejorar la imagen y apabullar al rival.
De esta manera, el Alcobendas solamente fue capaz de anotar 11 goles en el segundo acto. Un aspecto fundamental para el Ademar León y que debe afinar con la llegada de Zivan Pesic. Si bien, ante el conjunto madrileño el encargado de comandar la férrea defensa marista un Gonzalo Carou que sigue en un espléndido estado de forma. Y así pasaron los minutos con la sangría anotadora del conjunto marista que no se frenó hasta el final. El próximo sábado en el Palacio Municipal de los Deportes de León las cosas podrían ser muy diferentes ante el Oporto de un José Mario Carrillo que vuelve a casa.